La guardia de Infantería de la policía bonaerense detuvo e hirió a un militante de la JP Evita, Fernán López, de 23 años, durante la manifestación de repudio al ex comisario Luis Patti, quien concurrió a los Tribunales de San Martín para declarar en una de las causas por crímenes de lesa humanidad cometidas en épocas del terrorismo de Estado. También resultó herida la abogada Ana Oberling.
A la mañana temprano, un grupo de 30 manifestantes del Paufe se congregó para apoyar al ex comisario, acusado de encubrimiento, secuestros, torturas y homicidios. Un grupo más numeroso de militantes del Movimiento Evita, la JP Evita, Movimiento Libres del Sur, CTA y de H.I.J.O.S. se movilizó para repudiar al ex policía. Los insultos fueron subiendo de tono hasta que la Policía dispuso un cordón de efectivos con escudos, impidiendo que quienes repudiaban a Patti se acercaran a los tribunales y liberando la zona a los partidarios del ex comisario represor.
Minutos después de que Patti fuera trasladado rumbo al penal de Marcos Paz, y mientras le llovían huevazos, se produjo un incidente, en el que el militante de la JP Evita cayó al suelo. Los policías lo tomaron del pelo y lo detuvieron, mientras lo golpeaban. Luego lo ingresaron al juzgado al tiempo que decían desconocer su detención.
Se hicieron presentes en el lugar en repudio al accionar policial Edgardo Binstock, ex secretario de Derechos Humanos de la provincia de Buenos Aires y Victoria Donda, diputada nacional del Frente para la Victoria.
El genocida Luis Patti seguirá detenido mientras enfrenta un juicio por delitos de lesa humanidad durante la última dictadura: el juez federal Alberto Suares Araujo rechazó el pedido de excarcelación. Ante esta situación, es ya imposible que asuma como diputado. Al ex policía se le imputan la desaparición y el asesinato de Gastón Goncalvez, Carlos Souto y el diputado Diego Muniz Barreto, ocurridos entre 1976 y 1977, cuando Patti trabajaba en la comisaría de Escobar. También está acusado de haber encubierto a Jorge Granada y Luis Arias Duval, dos militares involucrados en un caso de desapariciones de personas durante la dictadura.
Desde la JP Evita convocamos a seguir movilizando para reclamar el avance de las causas por delitos de lesa humanidad cometidos durante la dictadura militar y la condena y encarcelamiento de todos los genocidas. También denunciamos el accionar de ciertos sectores de las fuerzas de seguridad que se resisten a la política de Derechos Humanos impulsada por el Gobierno nacional y sostenida por las organizaciones populares.
A la mañana temprano, un grupo de 30 manifestantes del Paufe se congregó para apoyar al ex comisario, acusado de encubrimiento, secuestros, torturas y homicidios. Un grupo más numeroso de militantes del Movimiento Evita, la JP Evita, Movimiento Libres del Sur, CTA y de H.I.J.O.S. se movilizó para repudiar al ex policía. Los insultos fueron subiendo de tono hasta que la Policía dispuso un cordón de efectivos con escudos, impidiendo que quienes repudiaban a Patti se acercaran a los tribunales y liberando la zona a los partidarios del ex comisario represor.
Minutos después de que Patti fuera trasladado rumbo al penal de Marcos Paz, y mientras le llovían huevazos, se produjo un incidente, en el que el militante de la JP Evita cayó al suelo. Los policías lo tomaron del pelo y lo detuvieron, mientras lo golpeaban. Luego lo ingresaron al juzgado al tiempo que decían desconocer su detención.
Se hicieron presentes en el lugar en repudio al accionar policial Edgardo Binstock, ex secretario de Derechos Humanos de la provincia de Buenos Aires y Victoria Donda, diputada nacional del Frente para la Victoria.
El genocida Luis Patti seguirá detenido mientras enfrenta un juicio por delitos de lesa humanidad durante la última dictadura: el juez federal Alberto Suares Araujo rechazó el pedido de excarcelación. Ante esta situación, es ya imposible que asuma como diputado. Al ex policía se le imputan la desaparición y el asesinato de Gastón Goncalvez, Carlos Souto y el diputado Diego Muniz Barreto, ocurridos entre 1976 y 1977, cuando Patti trabajaba en la comisaría de Escobar. También está acusado de haber encubierto a Jorge Granada y Luis Arias Duval, dos militares involucrados en un caso de desapariciones de personas durante la dictadura.
Desde la JP Evita convocamos a seguir movilizando para reclamar el avance de las causas por delitos de lesa humanidad cometidos durante la dictadura militar y la condena y encarcelamiento de todos los genocidas. También denunciamos el accionar de ciertos sectores de las fuerzas de seguridad que se resisten a la política de Derechos Humanos impulsada por el Gobierno nacional y sostenida por las organizaciones populares.
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