Desde el Movimiento Evita, la Juventud Peronista Evita y el Movimiento Universitario Evita participamos, este jueves 2 de octubre, del abrazo al Hospital Argerich junto a vecinos y agrupaciones sociales y políticas.
El Argerich viene sufriendo la falta de insumos y camas, producto de las políticas privatistas del gobierno de Macri. Este hospital, uno de los centros de salud más importantes del país, tiene unas 400 camas para internación y abarca 24 especialidades. Se atienden diariamente en sus consultorios 3.500 personas y se realizan 20.000 cirugías por año. El 40% de las intervenciones quirúrgicas que requieren una posterior internación en terapia intensiva debieron ser suspendidas por falta de camas. A esta situación, se suman las modificaciones en el sistema de compra de insumos que la administración porteña centralizó en el Ministerio de Hacienda, lo que generó grandes inconvenientes en el abastecimiento hospitalario.
"Este sistema fracasó y todavía no encontraron el proceso administrativo para poder dotar a los hospitales de los insumos en tiempo y forma, y que los pacientes no padezcan lo que están padeciendo", expresó Donato Spaccavento, director del Argerich, "este problema afecta a todos los hospitales y está produciendo un daño no sólo a los pacientes, sino también a sus familiares y al personal de hospital". "La gente que viene al hospital tiene necesidades y no es posible que no podamos darles sus medicamentos, o realizarle estudios porque muchos de los aparatos dejaron de funcionar, desde febrero, por falta de mantenimiento", señaló, por su parte, una enfermera.
La salud pública es un derecho de todos y el Estado debe ser un activo promotor de la inclusión social y la participación popular. No estamos dispuestos a permitir que el gobierno de Macri aplique en nuestra Ciudad las recetas neoliberales, poniendo al Estado al servicio de unos pocos y sus negociados y relegando las funciones sociales que hacen a las problemáticas más sentidas por la población como salud, educación y vivienda.
El Argerich viene sufriendo la falta de insumos y camas, producto de las políticas privatistas del gobierno de Macri. Este hospital, uno de los centros de salud más importantes del país, tiene unas 400 camas para internación y abarca 24 especialidades. Se atienden diariamente en sus consultorios 3.500 personas y se realizan 20.000 cirugías por año. El 40% de las intervenciones quirúrgicas que requieren una posterior internación en terapia intensiva debieron ser suspendidas por falta de camas. A esta situación, se suman las modificaciones en el sistema de compra de insumos que la administración porteña centralizó en el Ministerio de Hacienda, lo que generó grandes inconvenientes en el abastecimiento hospitalario.
"Este sistema fracasó y todavía no encontraron el proceso administrativo para poder dotar a los hospitales de los insumos en tiempo y forma, y que los pacientes no padezcan lo que están padeciendo", expresó Donato Spaccavento, director del Argerich, "este problema afecta a todos los hospitales y está produciendo un daño no sólo a los pacientes, sino también a sus familiares y al personal de hospital". "La gente que viene al hospital tiene necesidades y no es posible que no podamos darles sus medicamentos, o realizarle estudios porque muchos de los aparatos dejaron de funcionar, desde febrero, por falta de mantenimiento", señaló, por su parte, una enfermera.
La salud pública es un derecho de todos y el Estado debe ser un activo promotor de la inclusión social y la participación popular. No estamos dispuestos a permitir que el gobierno de Macri aplique en nuestra Ciudad las recetas neoliberales, poniendo al Estado al servicio de unos pocos y sus negociados y relegando las funciones sociales que hacen a las problemáticas más sentidas por la población como salud, educación y vivienda.
MOVIMIENTO EVITA
JUVENTUD PERONISTA EVITA
MOV. UNIVERSITARIO EVITA
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